Desde las raíces: «Una forma necesaria de resistencia cultural»

Semana a semana y adaptándonos a las condiciones climáticas, la Comunidad Indígena Punta Querandí mantiene el ritmo de trabajo y recibe visitantes que desde distintas ópticas se interesan en nuestra experiencia de lucha, situada en el límite de Tigre y Escobar, epicentro de los barrios privados responsables de la destrucción de enterratorios ancestrales y de miles de hectáreas de humedales continentales.

El domingo 22 de septiembre el clima amagó con tormentas fuertes que no fueron tales; pese a esa situación «de amenaza» pudimos llevar adelante algunas tareas, como la reparación de bancos y cambiar algunos puntales del deck del Museo Autónomo de Gestión Indígena.

Además se pisó barro como preparación de cara a la jornada de este domingo 29 de septiembre, cuando continuaremos revocando las paredes del Opy, uno de los espacios ceremoniales de Punta Querandí.

Después de compartir el almuerzo y unos primeros diálogos alrededor del fogón, las personas que vinieron a conocer el territorio hicieron la recorrida guiada por el Museo Autónomo de Gestión Indígena y el conjunto del espacio comunitario.

Camila Origüela, vecina de la localidad de Victoria (San Fernando), llegó por primera vez: «Conocí a Punta Querandí por los cursos de idiomas, ya que quería empezar a estudiar quechua por mis raíces. La experiencia fue profundamente enriquecedora, desde conocer a las personas que luchan diariamente por proteger este territorio indígena y sagrado hasta conocer la inmensa lucha que enfrentaron, demostrando un compromiso social enorme».

«Me encantaría regresar para participar en los trabajos y oficios tradicionales porque siento que esta conexión con mis raíces es una forma necesaria de resistencia cultural en nuestros días», comentó Camila.

Quienes siguen nuestra lucha desde años saben de la amplitud de actores políticos que han articulado con Punta Querandí y apoyado nuestros reclamos en estas dos décadas: desde la izquierda, sectores del peronismo y también espacios más conservadores.

De hecho, esa amplitud permitió a fines de 2018 en el Concejo Deliberante de Tigre una declaración de interés votada por unanimidad de concejales y concejalas del Frente Renovador, el Frente para la Victoria y Cambiemos.

Desde el barrio porteño de Boedo llegaron militantes de la Unidad Básica «Cristina Fernández de Kirchner» interesados en conocer la experiencia de lucha.

«Estamos muy agradecidos por el intercambio de experiencias, fue muy enriquecedor y movilizante ver todo ese proceso de lucha y cómo paso a paso fueron consiguiendo diferentes victorias para sus demandas», expresó Leonardo Pérez, referente del espacio, donde funciona la Biblioteca Popular «Arturo Jauretche» y el Centro de Jubilados «Milagros al Sur».

«Está muy bueno ver cómo poniéndole cabeza, trabajo y perseverancia se pueden lograr cosas grandes como lo que ustedes hicieron», señaló Leonardo Pérez, militante de La Cámpora.

El trabajo colectivo ha sido el eje fundamental para lograr el reconocimiento de los derechos de la Comunidad Indígena Punta Querandí y la protección del sitio sagrado. Para ver lo realizado durante los últimos meses, entrá a https://puntaquerandi.com/category/jornadas-comunitarias.

Sumate a las actividades de los domingos!

FRUTOS DE DOS DÉCADAS DE LUCHA

La conformación de la Comunidad Indígena Punta Querandí se inició a partir de la aparición de restos arqueológicos que hicieron visible la destrucción de enterratorios milenarios por el avance indiscriminado de los barrios privados de “Nordelta” y “Villa Nueva”, los cuales arrasaron los humedales continentales en una zona ancestralmente habitada por querandíes, chanás y guaraníes.

A dos décadas de este hecho, se obtuvieron varios triunfos:

En 2020, se firmó con el Municipio de Tigre el Convenio de Propiedad Comunitaria de Punta Querandí y se formó la Unión de Pueblos Originarios de Tigre y Escobar.

En 2021, se concretaron las primeras restituciones y reentierros de restos humanos ancestrales en el Gran Buenos Aires y los cursos de idiomas indígenas financiados por la Intendencia, que además otorgó un local de ventas en el Puerto de Frutos para colaborar en el desarrollo económico de las comunidades.

En 2022, el Instituto Nacional de Asuntos Indígenas aprobó la restitución de 42 ancestros y ancestras del sitio Arroyo Sarandí, espacio milenario destruido en los ’90 por Nordelta, y declaró «sitios sagrados» a Punta Querandí y La Bellaca.

En 2023, el Registro Provincial de Comunidades Indígenas inscribió la personería jurídica de Punta Querandí siendo la primera -junto a Tres Ombúes de La Matanza- en ser reconocida como pluriétnica en Buenos Aires.