Territorio comunitario, ancestral, sagrado y educativo de los Pueblos Originarios. Desembocadura del Arroyo Garín en el Canal Villanueva, Partido de Tigre, Provincia de Buenos Aires. Humedales continentales del río Luján.
El Convenio 169 de la OIT es de cumplimiento obligatorio para el Estado argentino en sus tres niveles: municipal, provincial y nacional. Una parte del tratado internacional se refiere a los idiomas de los pueblos originarios.
Las actividades sobre idiomas se incrementaron en el sitio sagrado Punta Querandí luego del encuentro de debate que tuvimos a fines de noviembre, “Educación intercultural y reafirmación de las lenguas indígenas en el Conurbano”. En enero se realizó un Ciclo sobre la Lengua y Cultura Qheshwa. En abril y mayo, aprendimos sobre la lengua guaraní, el Ava Ñeé. El 19 de junio inició un curso sobre el idioma qom, que se repetirá una vez por mes, a cargo de la profesora qom Nuhem Bashe de la provincia de Chaco.
¿Qué dice el Convenio Internacional 169 de la OIT sobre las lenguas indígenas y la educación?
Parte VI. Educación y Medios de Comunicación
(Algunos fragmentos)
Artículo 27
1. Los programas y los servicios de educación destinados a los pueblos interesados deberán desarrollarse y aplicarse en cooperación con éstos a fin de responder a sus necesidades particulares, y deberán abarcar su historia, sus conocimientos y técnicas, sus sistemas de valores y todas sus demás aspiraciones sociales, económicas y culturales.
Artículo 28
1. Siempre que sea viable, deberá enseñarse a los niños de los pueblos interesados a leer y a escribir en su propia lengua indígena o en la lengua que más comúnmente se hable en el grupo a que pertenezcan. Cuando ello no sea viable, las autoridades competentes deberán celebrar consultas con esos pueblos con miras a la adopción de medidas que permitan alcanzar este objetivo.
3. Deberán adoptarse disposiciones para preservar las lenguas indígenas de los pueblos interesados y promover el desarrollo y la práctica de las mismas.
Artículo 31
Deberán adoptarse medidas de carácter educativo en todos los sectores de la comunidad nacional, y especialmente en los que estén en contacto más directo con los pueblos interesados, con objeto de eliminar los prejuicios que pudieran tener con respecto a esos pueblos. A tal fin, deberán hacerse esfuerzos por asegurar que los libros de historia y demás material didáctico ofrezcan una descripción equitativa, exacta e instructiva de las sociedades y culturas de los pueblos interesados.