Territorio comunitario, ancestral, sagrado y educativo de los Pueblos Originarios. Desembocadura del Arroyo Garín en el Canal Villanueva, Partido de Tigre, Provincia de Buenos Aires. Humedales continentales del río Luján.
Alumnos y alumnas de cuarto año de la Escuela Secundaria 22 de Las Tunas (Pacheco), recorrieron la Comunidad Indígena Punta Querandí. La visita se llevó a cabo el pasado lunes, 21 de octubre. «La idea es seguir manteniendo vivo este espacio para poder conectarnos con las raíces ancestrales», expresó la psicóloga y docente Laura Otamendi.
Los estudiantes, junto a sus profesoras, conocieron el Museo Autónomo de Gestión Indígena, la Maloka (vivienda comunitaria) y el Opy (templo guaraní), entre otras construcciones. Pero lo más importante, fue el contacto con una experiencia muy particular de resistencia, explicó Laura Otamendi, docente de la materia Salud y Adolescencia.
«Se eligió Punta Querandí porque es un espacio comunitario, donde se observan lazos sociales e interculturales importantes, de resistencia al avance inmobiliario y a los intereses económicos que proponen el saqueo y la destrucción a cualquier precio, comandado por O’Reilly y compañía», manifestó Otamendi, quien estuvo acompañada por las profesoras Elena Salinas (Biología) y Nancy Cusit (Físico-Química).
Otro aspecto valorable es que la experiencia «da cuenta de la lucha colectiva para mantener los humedales y otras formas de conexión con la naturaleza propias de las culturas originarias, toba, wichi, kolla y guarani, que tenemos que recuperar».
También Punta Querandí es un caso testigo para hablar de «la salud socioambiental como un derecho».
Durante la bienvenida a los chicos y chicas, sólo una alumna reivindicó su origen familiar en Paraguay y expresó con orgullo que hablaba la lengua guaraní. Sin embargo, a medida que fueron pasando las horas, otras historias similares fueron emergiendo. Una situación que se repite en todas las escuelas y muestra la gran cantidad de población de origen indígena en municipios del conurbano como Tigre.
VALORES COMUNITARIOS
«Una de las formas saludables de resistir estos lugares tiene que ver con generar empatía, coooperación y solidaridad, valores que están olvidados ya que la cultura capitalista patriarcal boga por el individualismo, la apatía, el desinterés y la indiferencia», señaló la profe.
«En Punta Querandí esos valores se mantienen y por eso hay que seguir adelante, apoyarlos, darles visibilidad y acompañar para que siga creciendo», manifestó Laura Otamendi.
La profe de Salud y Adolescencia destacó «el trabajo incansable» de los miembros de la comunidad, «sin ustedes este espacio no sería posible y habría mucha más destrucción». Y reivindicó «el rol de las mujeres que hacen un montón».
Finalmente, Laura concluyó: «Punta Querandí da esperanza de que con la lucha, el trabajo comunitario y la solidaridad, es posible resistir».
La visita de la Escuela Secundaria 22 de Las Tunas es parte de una nutrida agenda de actividades educativas que se desarrolló todo el mes de octubre y continuará en noviembre.