Conocer la verdadera historia para que la educación sea una práctica liberadora

La Unión de Pueblos Originarios de Tigre y Escobar fue invitada al Centro Educativo de Nivel Secundario (CENS) Nº457 de El Talar para concientizar a los alumnos y alumnas de que «la identidad de nuestro país no se configura con los barcos de Europa sino que muchos argentinos descendemos de las comunidades indígenas», explicó la trabajadora social y docente Marcela Lesniowsky.

La charla tuvo lugar el jueves 18 de agosto por la noche en una sala colmada de estudiantes adultos de diversas edades. Además de escuchar las experiencias de Reinaldo Roa del Pueblo Guaraní y Lisette Fernández y Cintia López del Pueblo Qom, se proyectaron imágenes que forman parte de la exposición del Museo Autónomo de Gestión Indígena de la comunidad de Punta Querandí.

“El objetivo era concientizar, informar, tener la posibilidad de que la educación sea una práctica liberadora, conocer no la historia que está en los libros que muestra el triunfo de una clase dominante, sino la verdadera historia», señaló quien impulsó esta actividad, Marcela Lesniowsky, que en 2017 ya había invitado a integrantes de Punta Querandí a la Escuela Secundaria Nº13 de Los Troncos.

La docente manifestó que su intención era acercar a sus alumnos y alumnas a las realidades de los pueblos originarios en la región. “Si la historia la escriben los que ganan, eso quiere decir que hay otra historia. Acá había gente, había cultura y fueron masacrados, hubo un genocidio”, remarcó la trabajadora de la educación.

Entre las situaciones compartidas con los estudiantes, además del pasado indígena oculto de Buenos Aires y la resistencia al avance de los barrios privados en los humedales del río Luján, se habló de la Matanza de Napalpí ocurrida en Chaco en 1924, crimen de lesa humanidad por el cual el Estado Nacional fue sentenciado por genocidio en un histórico juicio y donde existen muchos familiares de sobrevivientes en Tigre y Escobar. Pero también hechos más recientes y locales, como el pedido de justicia por los feminicidios indígenas de Micaela y Nancy Fernández del Pueblo Qom en 2013 y 2014 en La Paloma y Las Tunas respetivamente.

“Esto tiene que ver con la identidad de Tigre, porque tenemos presencia de pueblos originarios y nuestra historia se remonta a cuando estas tierras eran habitadas por sus verdaderos dueños que fueron víctimas de un genocidio”, enfatizó Marcela Lesniowsky.

Durante la charla también se resaltaron algunos triunfos de las comunidades en el distrito: los primeros reentierros de los ancestros, el reconocimiento de los derechos territoriales indígenas en Punta Querandí frente al enorme poder de las desarrolladoras inmobiliarias de barrios privados y algunas políticas públicas como el financiamiento de cursos de idiomas originarios y la entrega de un local en el Puerto de Frutos de Tigre para vender artesanías y productos de las comunidades.