«Aprendieron mucho de historia, pero también de luchas y victorias»

Medio centenar de estudiantes del Colegio Señor de Mailín de Villa de Mayo (Malvinas Argentinas) y de la Secundaria Nº32 de Garín (Escobar) recorrieron el territorio comunitario de Punta Querandí. El ritmo de visitas educativas se mantiene firme en el sitio sagrado de los pueblos originarios ubicado en el límite de Tigre y Escobar, epicentro de los barrios privados responsables de la destrucción de enterratorios ancestrales y de miles de hectáreas de humedales continentales.

El 22 de junio fue el turno del sexto año del Colegio Señor de Mailín, del partido de Malvinas Argentinas, con el impulso de la docente Marcela Luque, quien mencionó que la visita se dio en el marco de la materia “Proyecto de Investigación en Ciencias Sociales”.

La dinámica de las salidas didácticas es similar desde hace varios años: comienza con una ronda de bienvenida donde se presentan todas las personas, para luego ingresar al Museo Autónomo de Gestión Indígena y hacer una recorrida por cada una de las construcciones y espacios significativos del territorio comunitario, de aproximadamente dos hectáreas.

«Consideramos muy relevante la visita ya que es una manera de visibilizar cómo operan estos espacios de resistencia, no sólo como ejemplo de lucha para el reconocimiento de derechos hacia las comunidades indígenas sino también como un disparador que nos permite tomar conciencia de una parte muy importante de nuestra identidad originaria», manifestó la Marcela Luque, profesora de historia.

La docente, quien vino el año pasado con estudiantes de esa misma institución, destacó que esa jornada coincidió con el emergente de las manifestaciones en la provincia de Jujuy. En ese sentido, «reflexionamos sobre la situación que están atravesando nuestros hermanos jujeños en el avasallamiento de su dignidad a la autodeterminación de los pueblos».

Además, a raíz de la visita «varios de los estudiantes se descubrieron hablando la lengua guaraní que habían aprendido de sus abuelos o de otros familiares».

«Esta actividad recién comienza ya que seguiremos trabajando esta temática en la escuela. Los estudiantes y docentes que acompañaron se fueron muy conmovidos y entusiasmados con la historia del lugar», amplió la trabajadora de la educación.

«Desde el equipo docente renovamos el compromiso de asistir cada año para sembrar conciencia y contribuir al despertar de esa honda espiritualidad indígena que todos llevamos dentro», fueron sus palabras finales.

“UN LUGAR DIGNO DE VISITAR”

Por su parte, el 3 de julio se realizó la visita del segundo año de la Escuela Secundaria Nº32 del barrio La Madrugada de Garín, en el vecino municipio de Escobar.

«La visita fue significativa y necesaria, doy fe que los chicos aprendieron mucho de historia, pero también de luchas y victorias. Gracias a la perseverancia y el trabajo arduo de la Comunidad de Punta Querandí, hoy es un lugar digno de visitar, a modo de paréntesis en tanta construcción privada», destacó Lucía Surban, profesora de historia que fue parte activa de la lucha de Punta Querandí hace más de diez años atrás.

«Es un lugar de conexión entre pares, un lugar de conexión con el medio ambiente y con nuestro pasado y presente originario, tantas veces invisibilizados en libros y clases áulicas», remarcó la docente, quien vive en el Delta tigrense.

«Se llevan de regalo la experiencia y la necesidad de compartirlo en sus casas, también la incógnita individual de conocer sus antepasados y de pensar Buenos Aires desde otro lugar gracias a todo lo que les contaron en Punta Querandí”, señaló Lucia.

UN EJE CLAVE DE TRABAJO

Las visitas de escuelas comenzaron hace más de una década, se incrementaron a la par del fortalecimiento de la resistencia y tuvieron un salto de calidad cuando la comunidad inauguró el Museo Autónomo de Gestión Indígena en 2017. Un espacio creado para exponer los vestigios ancestrales hallados en el sitio sagrado de los pueblos originarios y narrar la historia y el presente de las distintas luchas vinculadas a Punta Querandí.

El año pasado, hubo un récord de articulación con instituciones educativas con casi 40 actividades: Punta Querandí recibió 22 establecimientos escolares y realizó 16 charlas en escuelas en conjunto con la Unión de Pueblos Originarios de Tigre y Escobar.

FRUTOS DE DOS DÉCADAS DE LUCHA

La conformación de la Comunidad Indígena Punta Querandí se inició a partir de la aparición de restos arqueológicos que hicieron visible la destrucción de enterratorios milenarios por el avance indiscriminado de los barrios privados de “Nordelta” y “Villa Nueva”, los cuales arrasaron los humedales continentales en una zona ancestralmente habitada por querandíes, chanás y guaraníes.

A casi dos décadas de este hecho, se obtuvieron varios triunfos:

En 2020, se firmó el Convenio de Propiedad Comunitaria de Punta Querandí y se formó la Unión de Pueblos Originarios de Tigre y Escobar.

En 2021, se concretaron las primeras restituciones y reentierros de restos humanos ancestrales en el Gran Buenos Aires y los cursos de idiomas indígenas financiados por el Municipio de Tigre, que además otorgó un local de ventas en el Puerto de Frutos para colaborar en el desarrollo económico de las comunidades.

En 2022, el Instituto Nacional de Asuntos Indígenas aprobó la restitución de 42 ancestros y ancestras del sitio Arroyo Sarandí, espacio ancestral destruido en los ’90 por Nordelta, y declaró «sitios sagrados» a Punta Querandí y La Bellaca.